Lo primero es lo primero. Vayan por delante mis mejores deseos de Salud, Paz y Prosperidad a todos los seguidores de Salamancartv.com y por supuesto a los miembros del equipo humano que hace posible esta iniciativa que seguro nos seguirá deparando sorpresas en el año que vamos a estrenar.
Para mi publicación semanal, en esta ocasión, me hago eco de una noticia no por esperada me ha dejado de sorprender. Se trata del reconocimiento e identificación de seres humanos que sin duda se usará en el futuro. Estamos acostumbrados a sistemas no presenciales como documentos de identidad y contraseñas, también a sistemas presenciales como la lectura de huellas dactilares (fácilmente falsificables y con pocos puntos de referencia) o incluso técnicas más futuristas como la lectura de la retina de los ojos.
Parece que el futuro nos depara una técnica basada en la lectura de los vasos sanguíneos de la palma de la mano como firma digital única. Se trata de una iniciativa de la japonesa Fujitsu y la empresa húngara AlbaSec. Fujitsu a desarrollado el hardware (PalmSecure es un mini sensor de 3 x 3 cm) y AlbaSec ha desarrollado el software. El conjunto es un dispositivo capaz de reconocer 5 millones de puntos en el sistema circulatorio (en un solo segundo), frente a los escasos 50 puntos de otras técnicas de reconocimiento.
Según József Hermann, director de AlbaSec, “Todos los documentos, tarjetas, pasaportes o carnés se pueden falsificar”. Evitar esa falsificación y poder usar un sistema preciso de identificación capaz de ser utilizado en cualquier situación, por ejemplo donde uno se encuentra mojado y sin nada fue la necesidad que derivó en este proyecto.
Desde hace ya mucho tiempo la identificación personal se enfrenta al reto de ser clara e inequívoca. Hoy ya no basta una antigua foto y lo más obvio es utilizar la información que hay en los datos biométricos. Hasta ahora se han usado las huellas dactilares pero han resultado ser muy poco seguras y fácilmente falsificables. Se empezó a desarrollar la lectura de la retina pero el problema es que todavía no se sabe con seguridad si los rayos que se usan para leer la retina son o no dañinos para la vista).
El dispositivo basado en la lectura del sistema arteria de la palma de la mano tiene varias ventajas, ya que no es necesario que la mano entre en contacto con el vidrio, por lo que tampoco deja huellas, que facilitarían la copia de la información. la mano se coloca a cierta distancia del dispositivo. El aparato lee la información que debe leer y genera un “código hash”, una información que no guarda en su memoria, sino que la transmite al sistema que descifra estos datos. Por eso el sistema es el más seguro hasta el momento ya que una vez verificada la identidad, el dispositivo borra el código biométrico.
“Las informaciones que genera el sistema no pueden ser usadas para identificar o descifrar ninguna condición del usuario”, esto depende de otros sistemas con los que se comunica el aparato. Así, el escáner podría ser utilizado en la identificación personal, como complemento a los pasaportes o como el mismo código numérico que se usa en los cajeros. Para control de accesos, para firma de documentos, para…. “Mi número secreto es mi propia mano” y nadie más puede usarlo, recalca Hermann ya que el escáner también detecta la temperatura y la circulación de la sangre, por lo que el usuario debe estar presente en la identificación (vivo) y no sirve una mano cortada como por ejemplo en el caso de los dedos para la lectura de las huellas dactilares.
Muy pronto (quizá en 2014) nos acostumbraremos a ver estos dispositivos en todo tipo de controles de acceso y mecanismos que requieran identificación.
Seguimos avanzando hacia el futuro.
FELIZ 2014.